Joey Manic
Tenía pendiente compartir con ustedes mis retrasados desvaríos sobre los discos de Joe Crepúsculo: "Escuela de Zebras"(2007) y "Supercrepus" (2008) pero me surge una duda. ¿Existe lugar para la crítica musical de cierto calado de discos hoy en día ? Antes en los tiempos del monopolio de la radioformula y las tiendas de discos, escuchar un disco suponía comprarlo o que alguién que lo hubiera hecho te lo dejara o grabara. El oficio del crítico bién podría ser orientar de forma razonada al consumidor para que este optimizara sus recursos y su tiempo ante la adquisición. ¿ Pero tiene el mismo sentido esta labor en los tiempos del Spotify, las descargas directas y los P2P ? ¿ Tiene sentido desarollar textos sobre unas canciones y unas letras que uno mismo puede disfrutar de forma inmediata ? ¿ O basta con recomendar un disco someramente dando unas determinadas coordenadas ? "Te gustará si te molan Cabeza de Perro e Ivan Ferreiro"
El Maestro Tones ya ha comentado alguna vez que la crítica musical no es un género musical, es un género de ensayo literario. Esto parece de perogrullo pero tiene más miga de lo que parece. Intentar plasmar un metalenguaje musical a través de la literatura puede ser una pirueta interesante pero también puede convertirse en un fallido ejercicio plagado de carencias y demasiadas metareferencias. Es decir, uno puede utilizar la música, sus textos como sujeto literario o para hablar de otras cosas, pero intentar recoger la esencia de musica ¿No es un esfuerzo inutil que se podría solucionar con un inmediato y rápido click ?
Dicho ésto, no me voy a extender en demasía sobre Joe Crepúsculo, aquí tienen sus discos. Yo se los recomiendo. La única duda que me queda sobre este artista es su genuinidad. Me explico. Oyendo sus melodías Lo-Fi plagadas de organillos Casio PT-1., sus letras ultracostumbristas y esas voces superpuestas con registros que van desde crooner a teleñeco, a uno le surge la duda sobre la sinceridad de su propuesta. ¿ Es todo una impostura y una sucesión de extravagancias destinadas a epatar ? ¿ Estamos oyendo la música que suena en su cabeza y corazón ?
El libro "Madre Noche" del fundamental escritor Kurt Vonnegut versa sobre que un espía norteamericano se infiltra en la maquinaria propagandística nazi y acaba convirtiéndose en un demágogo locutor de radio de gran popularidad en Alemania. En uno de los pasajes ya con una Alemania al borde de la derrota, el espía le confiesa a un jerifalte nazi que él, en realidad, es un agente encubierto de los Aliados, a lo cual el aleman de forma impasible le responde que le da exactamente igual, ya que había realizado su trabajo de forma mas eficaz y mejor que el más devoto hitleriano. Lo mismo me ocurre con Joe Crepúsculo, si quería engatusarnos a cuatro modernos despistados, lo ha hecho con tal contundencia y fuerza, que es que nos da igual.
El Maestro Tones ya ha comentado alguna vez que la crítica musical no es un género musical, es un género de ensayo literario. Esto parece de perogrullo pero tiene más miga de lo que parece. Intentar plasmar un metalenguaje musical a través de la literatura puede ser una pirueta interesante pero también puede convertirse en un fallido ejercicio plagado de carencias y demasiadas metareferencias. Es decir, uno puede utilizar la música, sus textos como sujeto literario o para hablar de otras cosas, pero intentar recoger la esencia de musica ¿No es un esfuerzo inutil que se podría solucionar con un inmediato y rápido click ?
Dicho ésto, no me voy a extender en demasía sobre Joe Crepúsculo, aquí tienen sus discos. Yo se los recomiendo. La única duda que me queda sobre este artista es su genuinidad. Me explico. Oyendo sus melodías Lo-Fi plagadas de organillos Casio PT-1., sus letras ultracostumbristas y esas voces superpuestas con registros que van desde crooner a teleñeco, a uno le surge la duda sobre la sinceridad de su propuesta. ¿ Es todo una impostura y una sucesión de extravagancias destinadas a epatar ? ¿ Estamos oyendo la música que suena en su cabeza y corazón ?
El libro "Madre Noche" del fundamental escritor Kurt Vonnegut versa sobre que un espía norteamericano se infiltra en la maquinaria propagandística nazi y acaba convirtiéndose en un demágogo locutor de radio de gran popularidad en Alemania. En uno de los pasajes ya con una Alemania al borde de la derrota, el espía le confiesa a un jerifalte nazi que él, en realidad, es un agente encubierto de los Aliados, a lo cual el aleman de forma impasible le responde que le da exactamente igual, ya que había realizado su trabajo de forma mas eficaz y mejor que el más devoto hitleriano. Lo mismo me ocurre con Joe Crepúsculo, si quería engatusarnos a cuatro modernos despistados, lo ha hecho con tal contundencia y fuerza, que es que nos da igual.
3 comentarios:
“¿Pero por qué le dejan sacar discos? ¡Qué horror”
Por su ternura, y por su humor, está llamado a ser un clásico. Heterodoxo y frenopático, pero clásico.
Storka:
Eso de que le dejan sacar discos, no se porque lo dices porque sus discos basicamente se descargan. Quizas te querias referir a que le dejen tocar, pues no seria el caso de Benicassim donde se conjuraron los elementos para que no pudieramos verle tocar...
Mycroft:
Efectivamente una de los fenomenos mas importantes de la cultura pop española de los ultimos años (sic), quizas para algunos eso no sea decir mucho pero si para mí...
Y su sentido del humor me parece enorme, de hecho como comento a veces miro a la banda para ver si no han levantado el juez de linea/raya el banderin...
Un grande
Publicar un comentario