Perdidos: "Funcionó"

Hoy a las 8h00 de la mañana hora española se cerraba el mismo ojo que se abría hace 6 años. Entre medias distan, sí, más de 100 horas de televisión y una de las mayores epopeyas de la narrativa contemporanea tanto en lo que concierne a su creación como a su recepción. Como se ha repetido hasta la saciedad Perdidos era más que una serie tradicional donde los fans opinaban sino que el fandom y su feedback permanentemente in progress formaba parte indisoluble de la saga. Mientras escribo ésto, se está gestando posiblemente uno de los mayores debates de la historia del entretenimiento sólo al nivel de Matrix o Star Wars. La intensidad, les advierto, va a ser teológica con devotos, herejes y corrientes antagónicas dentro del ejercicio de la propia fe.

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A estas alturas y con el fin tan reciente no quiero entrar a analizar la trama y subtramas de la serie así como sus infinitos cables sueltos. Ya daré rienda suelta a mi devoción en algún foro sin riesgo de spoilearle a nadie la serie o quizás dentro de algunos meses me atreva con un análisis detallado, pero por supuesto no hoy.

Lo único que me atrevo a decir y en claro homenaje a la serie es que: "It worked", Lost ha funcionado. Su imposible mezcla de Ciencia Ficción Vs Culebrón, Filosofía New Age Vs Filosofía Old School, Comedia Vs Dramón, Lealtad al Fandom Vs Intereses Industriales ha acabado por cuajar en una saga cuya mayor proeza ha sido mantener ese delicado equilibrio hasta el último minuto de metraje.

Y sobretodo lo que permanece y trasciende son esos personajes: "Saint Jack", "Hugo the Dude", "Locke the Reborn", "Bigmouth Sawyer", "Ben Linus the Most Clever Dumb Ever", etc... En una de las cortinillas cursis de Cuatro nos decían esta mañana que donde quisimos ver numeros, había almas. No le falta razón aunque siempre vendrá algún fanático del Método a decirnos una de esas cosas raras de que los personajes eran unidimensionales cuando para mí Lost no deja de ser un estudio más de la naturaleza humana y los propios protagonistas no dejan de ser representaciones de distintos aspectos de ésta, siempre incompleta y fallida.

Esta mañana en un acalorado debate me arrojaban la idea de que en el fondo Perdidos no era arte, que Perdidos no se acercaba a lo sublime y que no merecía tanta admiración desmedida. Y es cierto, pero puedo afirmar sin sombra de duda que "Lost" es la más emocionante, emotiva y duradera montaña rusa en la que me he montado nunca.