Me sorprende ver como cierta gente se indigne con que Díaz Ferrán sea el presidente de la Patronal cuando para mí este señor representa a la perfección los valores e intereses de nuestra clase empresarial. Por supuesto decimos "perfección" no en un sentido ético o de virtud moral sino de recoger de forma plena la esencia de un categoría determinada.
Díaz Ferrán es un presidente perfecto en el mismo sentido que Al Capone podía ser un mafioso perfecto o Trujillo un dictador paradigmático de república bananera. El caballero recoge y sublima las características de nuestros empresarios: maneras prepotentes, incumple sus compromisos, cierra empresas, le intervienen empresas, se desentiende del destino de sus empleados despedidos, propone restaurar la semi-esclavitud, etc... Un crack.
Sinceramente prefiero que este señor sea el interlocutor de la patronal antes que algún encantador de serpientes de maneras refinadas y maestro de las RR.PP. Su agenda es tan burda y transparente que no admite dudas sobre los objetivos de las empresas. Es lo que hay.
1 comentario:
Siempre se ha dicho que es preferible un malo a un tonto: al malo lo ves venir, al otro no.
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