martes, 1 de febrero de 2011

El Re-Incidente (Vigalondo, 2011)


Ese de allí es el cántabro ese que está fatal, ¿no?


Sobre el Incidente Vigalondo, poco se puede añadir más. Si visitan el blog del propio afectado, podrán leer aparte de la opinión del director así como otras firmas invitadas que aportan interesantes perspectivas sobre el affaire (en particular destacaría la de Tones con una traca final que suena incluso a manifiesto generacional).

Mi posición sobre el asunto coincide mayoritariamente con la que podrán leer en el blog del director y me parece ridículo hasta tener que entrar a justificar la postura del director. De las reacciones de ciertos medios que por razones empresariales aprovechan la movida para embestir a raíz de la participación de Vigalondo en la campaña de El País, tampoco creo que haga falta hablar. Un periódico que insinúa que miembros de un partido democrático conspiraron con terroristas para matar 200 personas en aquel aciago 11M (y provocar que el Gobierno de España mintiera sobre la autoría del mayor atentado de la historia de España), que no dejará de decir sobre un twittero.

A mí lo que más me ha molado de todo este sarao, ha sido ver como Vigalondo ha sido fiel al espíritu del humor, de la comedia y si me apuran del Twitter. Todo podría haberse solucionado con un tweet espantada donde afirmara que todo se trataba de un simple malentendido y pedir perdón a propios y extraños. Pero no. Aún siendo consciente de que sólo podría empeorar el asunto , Vigalondo decide hacerse un bonzo y jugársela en un todo por un todo con un crescendo de tweets que sabe que sólo pueden acarrearle una hecatombe mediática. Con un par.

Quiero creer que el mundo no puede ser tan necio para que este incidente pueda suponer un obstáculo para la carrera profesional de Vigalondo aunque zancadillas no le están faltando. A mí por lo menos, su insobornabilidad ante la que está cayéndole encima está siendo una de los pocas alegrías que nos está dando este abrupto 2011.

8 comentarios:

Óscar dijo...

Buen post ;)

Aprovecho que soy el primero en comentar para tocar los huevecillos: En el segundo párrafo, al final, debería poner "qué no dejará de decir sobre un twittero.". Las tildes (o su ausencia mejor dicho) dan lugar a una frase un tanto desconcertante. Saludos!

Paolo2000 dijo...

Gracias !

Si es que soy un Blogger de EGB !!! No hay Cuadernos Rubio 2.0 ???

Condemor dijo...

Por favor cambia el color de fondo (y por consiguiente de la fuente).

Se me ha quedao la retina a rayas blancas y negras.

El post mu mono.

Paolo2000 dijo...

Joder, me están poniendo a caldo. Ya que estamos. alguna sugerencia para lo del fondo y fuente ???

Mycroft dijo...

Mi ventaja es que el Vigalondo-personaje (no conozco a la persona) ya no lo podía tragar de antes, así que no tengo que unfollowearlo, ni nada, porque apoyo el humor corrosivo, y negro, y sin cadena.

Pero esto no es el caso. El el blog de Noel (y un como en el de El Zurdo, que expone el tema impecablemente, él que fue etiquetado, al que no se le ha consentido ni una meada fuera de tiesto) he expuesto mi posturo. Muy a favor del humor negro y muy en contra del protagonista del asunto, de su estrategia, de su sentido del humor, del cálculo mercadotécnico, y de su elevación a no sé que altar punk de la incorrección.

Los provocadores no lloran. Los tipos duron encajan los golpes, y si acaso sueltan palabrotas. Pero no lloran y se las dan de humoristas sibaritas e incomprendidos. Eso no lo hacían Bruce, Pryor, Hicks...

Paolo2000 dijo...

Hombre, hasta el post semi-apologético, Vigalondo se pegó unas faltadas bastante importantes en el twitter que no desentonarían en ninguno de los grandes artistas que menciona...

Pero como usted dice, dejando de lado a los personajes, hagámoslo por las risas !!!

Mycroft dijo...

Mi posición es rara. Me veo en la tesitura de cargar contra los detractores y contra los defensores de Vigalondo. Muy en contra de todos ellos. Porque no nos mueven las mismas razones ni las mismas percepciones.

Como he dicho en lo de Noel, Arevalo tiene todo el derecho a hacer humor con retrasados mentales, y yo así lo expondré siempre, otra cosa es la opinión que me merezca, o la gracia que me haga.

Y lo digo porque el nivel está más ahí, que en un gervais.

Anónimo dijo...

lo de vigalondo ha sido un montaje