lunes, 21 de septiembre de 2009

Vive la France !


Ça Marche !!!
Hace unos cuantos años me vi en la tesitura de trabajar en Francia como representante comercial. Eran viajes intensivos de dos semanas "on the road" donde no paraba de visitar clientes por todo el hexágono francés. Eran los años 2003 y 2004 y Francia se encontraba sumida en un aparente letargo. Todos los empresarios franceses que visitaba me salían con la misma cantinela. La nación estaba asfixiada por la presión fiscal, el exceso de proteccionismo social, la fuerza de los sindicatos, un escaso crecimiento económico y la puntilla eran medidas tan contraproducentes como la semana trá de 35 horas que se consideraba todo un holocausto socioeconómico. Todos envidiaban, no obstante, a España y su dinamismo y daban por hecho la decadencia de Francia ante el imparable ascenso del nuevo campeón económico.

El principal acusado del anquilosamiento galo era el Partido Socialista y de ese clamor surge la figura de un dinámico e hiperactivo Sarkozy que accede al Eliseo con la firme promesa de relanzar la economía y romper con el legado de desidia y complacencia . Sarkozy de hecho venía con un proyecto revolucionario de corte neoconservador con Thatcher y Reagan como referentes: liberalización en la economía, atlantismo frente a eurocentrismo, "mano dura" contra los franceses de mala fe y la cantinela de la cultura del esfuerzo.

Pero entre 2008 y 2009 pasa lo que pasa y resulta que el vertiginoso dinamismo de economías como la española, la británica o la norteamericana tenía cimientos de barro produciendose la debacle que todos sabemos y sufrimos; mientras economías supuestamente escleróticas como la Francesa demuestran una resistencia enorme a la recesión y cual es la principal razón: una estructura económica con unos sectores pautadores fuertes y con inversión elevada en I + D ( Ingeniería Nuclear, Ingeniería Aeronaútica, Automóviles, etc...) no sujetos a financiación "barra libre ", una fuerte presión fiscal, un sector público consolidado y unas garantías sociales que amortiguan los vaivenes sociales.

Por supuesto que Sarkozy, un animal político con instintos de supervivencia ultradesarrollados, a medio camino de su "Retoma de la Bastilla ", frena, da marcha atrás y reformula su discurso de una Francia fuerte y social olvidandose de los canticos de sirena neoconservadores. Justo lo mismo, pero en sentido contrario, que hizo ZP cuando subió al poder y se olvida de su discurso anti-burbujista, abraza la fantasia del "aterrizaje suave" y se apropia de las tasas de crecimiento y desempleo del ladrillazo . Este es un error que, sin duda, él y su Partido van a pagar con creces.

Pero no se crean que todos los políticos son capaces de adaptarse a los tiempos que corren o si no, díganme que hace todo un Lider de la Oposición pidiendo maquinalmente que bajen los impuestos para salir de esta crisis. Osea la receta por defecto de la misma ideología neoliberal que acaba de ser arrollada y desahuciada por la Gran Recesión. Con un sector privado KO, un sistema bancario paralizado, una población en peligro creciente de exclusión y aquí aparece un señor que quiere menos Estado. Vamos, que no se entera de nada. Prefiero pensar que está siendo cínico, además de demagogo ( "Zapatero es un peligro para el bolsillo de los Españoles"), y que esa no es su mágica receta sino un mantra sloganero , porque si se cree sus propias boutades, entonces sí que estamos apañados...

2 comentarios:

Mycroft dijo...

Opino exactamente lo mismo que tú sobre la capacidad de adaptación sarkozyana, el abandono de su discurso inicial buscando adaptarse a la situación de la forma más óptima.
Al principio lo miré con desconfianza como un reaccionario más, pero es esa flaxibilidad pragmática el secreto de su éxito.
Vamos que si hubiera un proyecto conservador semejante en España, contaban conmigo de todas todas. Pero no lo hay, solo hay lo que hay: Gente esperando que el socialismo caiga por su propio peso para heredar las ruinas sin esfuerzo.

Paolo2000 dijo...

En nuestra admiracion a Sarko creo que nos quedamos bastante solos pero sí estamos de acuerdo...

Si rectificar es de sabios, sobrevivir ni le cuento...