Apología breve, apesadumbrada y parcial de "Il Cavaliere"

Livin' la vida loca

Hace ya algunos años tuve un profesor en la Universidad que cultivaba cierta imagen donjuanesca y se vanagloriaba delante del alumnado que él era una persona "moral en lo fundamental". Para mí que detrás de su filosofía de vida, estaba subrepticiamente dejando una puerta abierta a cualquier alumna interesada en sus encantos, pero reconozco que aquella frase encerraba un valido mensaje anti-mojigato. ¿ Que más da si un profesor es un canalla si los alumnos aprenden ? ¿ Que más da si un político lleva una vida disoluta si luego es un eficaz gestor de lo público ? Como se le atribuye a Mao: "No importa de que color sea el gato, lo importante es que cace ratones"

Estos desvarios me vienen a la cabeza a raiz de los sucesivos escándalos de Berluscosni, que efectivamente son jugosos en detalles escabrosos pero que mientras no se demuestre lo contrario pertenecen a la esfera de lo privado. A mí, como si pillan a Berlusconi montando una orgia con señoritas y señoritos (Bueno, de hecho lo han pillado, ¿no?), mientras se trate de personas adultas que muestran su consentimiento y no se han utilizado ni dispuesto de medios públicos para organizarlos, sinceramente puede hacer lo que quiera. Faltaría más.

Con todo esto, uno no quiere decir que alguién como Berlusconi sea un buen político que ni mucho menos, si no que creo que se le está atacando por las razones equivocadas. A Berlusconi se le puede criticar por blindarse judicialmente, por existir una muy dudosa línea entre su responsabilidad pública y sus negocios privados, por su control mediático, por sus declaraciones irresponsables sobre cualquier tema, por querer cambiar la Constitución en beneficio de su partido y sus aliados políticos, por su política migratoria abiertamente racista, por sus reformas en pos de una precarización laboral colectiva, etc... Realmente hay donde elegir pero le están haciendo un gran favor si en vez de sacar esto a la palestra, se empieza a especular que si organiza bacanales y orgias en noches locas de verano. Y lo peor creo que esta actitud pública de gigolo chic, que de una manera mas discreta también cultiva Sarkoszy o un Aznar encantado con los rumorese sobre su hombría , puede convertirse en un peligroso nuevo populismo, incluso rentable electoralmente, y alentado por una prensa que atacándole, le está encumbrando en el imaginario colectivo como el Macho Alfa Nacional.